El le preparaba el café y se sentaba a su lado a conversar sobre sus sueños. Pasaban los días y se repetía el mismo rito. Cincuenta años juntos, no hijos, solo largas compañías llenas de dedicación y amor. El hedor se acrecentaba, pero no importaba, al menos su figura estaba allí. Hasta que un vecino lo notificó.
MICRORRELATOS Y OTRAS HIPERBREVEDADES DE HÉCTOR RIVERO A very good source to get scripts for film school shorts,all commercial use is copyrighted and exclusive property of the author. No puede copiar, reproducir, vender, distribuir, publicar, exhibir, modificar, crear trabajos derivados, transmitir o, de cualquier forma explotar ninguno de los materiales, trabajos o propiedad intelectual pertenecientes a a este blog sin explícito permiso.
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"Aturdido y abrumado, por la duda de los celos se ve triste en la cantina a un borracho ya sin fe, con los nervios ..." El viej...
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Y sobre la mesa quedó la copa de tu vino… y lentamente fui dibujando con mis ojos tu suave sonrisa, agarré la copa y te di un beso en el m...
Se vive hasta el final.
ResponderEliminarMejor morir pegando un paso de baile que electrocutado.