ERROR DE CÁLCULO EN LA TRAYECTORIA
Abducido, el hermano Macario, fue devuelto a la Tierra por los alienígenas en el mismo sitio que fue raptado, bajo el limonero en el patio trasero del monasterio. Como despertó de un sueño criogénico no se acordaba de nada; se sentía muy bien. Fue cuando llegó a su celda que notó algo diferente: en la sobria pared detrás de su camastro, en vez de un crucifijo, había una soga con lazo de ahorcado. Asombrado, gritó. Los demás monjes corrieron hacia él; pero quedó preso de horror al ver que ellos lo miraban como si estuviera bananas, y en sus cuellos llevaban pequeñas sogas con nudo de ahorcado….
jajaja pequeño error, habrá sido lugar o tiempo equivocado?
ResponderEliminarmuy bueno!
te dejo mi direccion para que te pases cuando puedas
www.palabrasqueconjuran.blogspot.com
saludos!!!!
Hola y gracias. Ya pasé por palabras que conjuran, y te he enlazado. Un gusto conocerte. :)
ResponderEliminarRealidad paralela.
ResponderEliminarUn abrazo Héctor.
Eso es así, Torcuato; fascinante tema.
ResponderEliminarQué maravilla poder llevarnos sólo con palabras, a la celda de un monasterio, para sorprendernos juntos... Un abrazo
ResponderEliminarHola, María Luisa,gracias por comentar. Un abrazo.
ResponderEliminarMaestro, espléndido relato de la microficción teológica.
ResponderEliminar